Capricornio: Una relación perfectamente imperfecta

Capricornio: Una relación perfectamente imperfecta

Como sabemos que las cabras tiran al monte… ¡Capricornio esta semana #HigoVerde es tu lugar!.

Capricornio cuenta con una intensa vida sexual, siempre tiene ganas de pasarlo bien. Suele aguantar mucho durante sus relaciones sexuales, si lo que quieres es una persona para disfrutar durante horas, tenemos a tu candidatx.

Características sexuales de los Capricornio

Son personas con ganas constantes de tener sexo, aunque no son muy innovadores, su aspecto noble les lleva por una ruta muy clásica, es por lo que requieren de un acompañante que sea innovador o que al menos le proponga planes que les saquen de la rutina.

Como a todo signo le envuelve una magia, el punto fuerte de capricornio son los lugares inesperados, es un signo que si tiene ganas de sexo no lo reprimirá bajo ninguna circunstancia, da igual el lugar.

Su principal inconveniente es que son muy reservados, si de verdad quieres que se abran sexualmente debes ganarte su confianza.

Suelen ser un poco dominantes, es por lo que se aseguran que la persona con la que tienen encuentros está segura y confía plenamente en su persona.

¿Quieres conocer al Capricornio de esta semana?… ¡Damos paso a María!

¿Alguna vez habéis sentido que os parecéis a alguien pero al mismo tiempo sois muy diferentes?. Sin duda fue lo primero que pensé cuando lo conocí, seríamos una mezcla perfecta de agua y aceite, si la composición fuese otra muy diferente.

Todo comenzó el verano pasado, llevábamos tiempo conociéndonos, la verdad que teníamos ese tipo de conexión que tienes con alguien que canta a la vez que tú una canción, o que cuando hablas dices la misma palabra… ¡Esos éramos nosotros!.

Mi nombre es María, soy profesora interina en un pueblo de Madrid, estar sola en un lugar en el que no conoces a nadie es aburrido, por eso, me apunté al gimnasio municipal, donde conocí a Jaime, el monitor que todavía me hace temblar.

Cuando llevaba un mes apuntada, Jaime todavía estaba con la que era su ex-novia, por eso, no había surgido nada, además, yo necesito tener un mínimo de confianza para poder tener algo con alguien, soy bastante clásica y no me fio de cualquiera.

La novia de Jaime rompió su relación, al parecer se había enamorado de otro, por lo que él me propuso empezar a quedar, yo le aseguré que si todo era una amistad sí, pero que no podía comprometerme a nada, así que empezamos quedando para actividades como las de cualquier otra amistad, leer libros, ir de paseo, tomarnos algo, salir de fiesta, etc. Sin darme cuenta, Jaime había ocupado un puesto bastante importante en mi vida.

Una noche de Julio quedamos para ir a cenar, nos habíamos bebido cuatro botellas de vino, bastante contentos, me dijo que si me acompañaba a casa, yo le dije que sí, antes de llegar, pasamos al lado del gimnasio, donde con picardía le pregunté si me podía impartir una clase personal. Él riéndose, sacó las llaves de su bolsillo y abrió la puerta, por lo que entramos decididos.

Él cogió un altavoz pequeño que había en una bicicleta estática y puso una canción bajita para que nadie nos oyese, de forma sensual se colgó el altavoz en la hebilla del cinturón. Bailábamos un poco bebidos, mientras sin darnos cuenta perdíamos el balance de nuestros cuerpos mientras el calor aumentaba. Sin más dilación se tumbó en una colchoneta grande que ocupaba toda la zona izquierda del local. Yo, entre risas, me dejé caer para tumbarme a su lado.

De repente, y casi sin esperarlo se lanzó y me robó un beso. Me quitó el pantalón sin decir ni una sola palabra, con sus gestos lo decía todo.

Me cogió y de un giro firme me llevó hacia él. Empezó a besarme todo el cuerpo, mi respiración estaba cada vez más agitada. De un giro y sin poder más, le cogí de la cabeza y le puse boca abajo, comencé besándole la espalda poco a poco, hasta que irremediablemente comencé a realizarle un beso negro, dudosa me dirigí a él:

  • ¿Te hace cosquillas?.
  • Sí, pero mola, sigue…

Seguí aumentando el ritmo, hasta que se dio la vuelta y le realicé sexo oral, le ordené que pusiese de rodillas y me devolviese lo prestado, a lo que él sin duda respondió con un sí tajante.

Lo cogí de la mano y me lo llevé hacia las duchas donde nos quitamos la poca ropa que nos quedaba, de un salto me elevé encima suya. Aumentamos el ritmo hasta que inevitablemente y de un gran grito que se proyectó en el gimnasio terminamos con un gran orgasmo.

A día de hoy somos muy amigos, la verdad que aunque no hemos llegado a tener nada serio por nuestras diferencias, nos entendemos muy bien cuando quedamos.

Muy bien María, como buen capricornio conseguisteis mantener muy buena relación y pasarlo muy bien, ya que aunque tengáis diferencias, la confianza para ti lo es todo.

Seguro que no hay capricornio que se te resista…¡Las cosas de palacio van despacio!

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