Spanking: ¡El poder del azote consensuado!.

¿Has oído hablar sobre esta técnica?, seguramente la hayas practicado alguna vez sin conocer cuál era su nombre real.

Hace referencia al placer de los azotes consentidos, puede resultar muy excitante si se practica de forma adecuada.

¿Qué es exactamente el spanking?

Este término inglés puede traducirse como la técnica de azotar a tu pareja de manera consentida, sin importar su sexo. Es una práctica muy utilizada ente los amantes del BDSM, muy extendida, sobre todo el azote en las nalgas.

Para llevarla a cabo deben definirse dos roles durante el acto, una persona será la encargada de dominar y la otra la que reciba los azotes, también conocida como sumisa/o.

Es muy importante variar el ritmo, aguantando siempre los niveles practicados.

Disfrútala con una persona con la que tengas mucha confianza, esto intensificará el placer y hará que ambos conozcáis vuestros límites.

¿Quieres conocer los beneficios del spanking? ¡Sigue leyendo que te los explicamos!.

Potencia la excitación y el misterio de tus relaciones sexuales.
Disfruta de nuevas experiencias.
Afianza la confianza con tu pareja, al comunicaros de forma sana que es lo que más os gusta hace que se multiplique el placer.
Conoce mejor a la persona que tienes al lado.
Empezar con técnicas de dominación/sumisión puede abrirte un nuevo abanico de excitantes posibilidades.

Consejos para disfrutar de esta práctica al máximo:

Siempre debe ser una práctica consentida por ambas partes.
Establece límites y controla tus niveles de placer-dolor.
Ten en cuenta las reacciones de tu pareja para saber intensificar el azote.
Ve poco a poco.
Empieza por encima de la ropa y ve deshaciéndote de ella poco a poco.
Utiliza kits de juguetes sexuales, azotadores, látigos, columpios, etc.
Es muy importante establecer una palabra de seguridad que permita parar en un momento determinado.
Ve variando la parte del cuerpo y la técnica utilizada.
Practícalo mediante juegos eróticos.
Muéstrale a tu pareja que es lo que quieres en todo momento, no te de vergüenza, la base de una relación es la confianza.

Complementos sexuales que necesitas para disfrutar del spanking.

Fustas: Este juguete de cuero emite un sonido muy excitante cuando se produce el azote.

Látigos: Puedes utilizarlo con la persona que tienes al lado o fustigar a objetos de la habitación.

Azotadores: Son muy fáciles de utilizar por su ergonomía.

Columpios sexuales y máscaras: Este tipo de complementos hace que aumente el misterio y el placer, ya que la situación puede volverse enigmática y fantasiosa.

Plugs anales: Se trata de una estimulación muy placentera, siempre y cuando se respete la integridad física y psicológica de la persona. Este complemento es muy estimulante cuando se alterna con alguno de los anteriores, haciendo de ello una experiencia única.

¡Manos a la obra!

Ésta técnica puede llevarse a cabo de diferentes posiciones: en la cama, mesa, columpio, sofá, de pie, de rodillas, mirando a tu pareja, con la cabeza al frente, etc.
Potencia cualquier situación con los objetos citados anteriormente.
No olvides nunca que las técnicas BDSM deben seguir las reglas establecidas por el SSC: Sensato, Seguro y Consensuado.
Cuando terminéis prestad atención al after-care, este término es lo que se conoce como los cuidados posteriores de una técnica BDSM.