Géminis: Vacaciones en París.

Géminis

Como buen Géminis Noa experimentó una noche de pasión guiada por dos cómplices curiosos dispuestos a descubrir y probar nuevas experiencias.

Si la reputación es algo que debe ganarse, querido Géminis lo has conseguido. Eres el tercero de la lista.

Este signo zodiacal está constantemente experimentando, además, posee una personalidad muy camaleónica, por lo que hace que responda con facilidad ante cualquier situación.

Características sexuales de los géminis:

Son grandes amantes, para ellos el sexo debe estar regido por los pilares fundamentales del aspecto físico, emocional y sensual. Si estás buscando a una persona aventurera que te complazca tenemos al candidato perfecto.

Géminis valora mucho la originalidad y la innovación, por lo que te aconsejamos que utilices todo tipo de juguetes, posturas y situaciones que se salgan de lo normal.

Con este signo cobra sentido la frase “siempre recibes lo que das”, ya que aunque están dispuestos a todo, lo quieren de vuelta.

No hagamos esperar más a Noa que nos ha contado su historia y nosotros estamos dispuestos a compartirla con todos vosotros.

Si algo tiene el amor prohibido es ese encanto especial que lo envuelve, que nos anima a luchar más y más por conseguir eso que parece imposible. Jamás olvidaré mis vacaciones en Paris.

Todo comenzó esta Semana Santa, mi familia y yo fuimos a visitar a nuestros parientes de Francia. Cuando llegamos, mi tía nos explicó que ellos se quedarían en piso de abajo y mi primo y yo compartiríamos el de arriba.

Era una tarde bastante normal, mi primo estaba jugando a la play, por lo que les pregunté si podía unirme. Inmediatamente mi primo Lucas respondió un “Noa estoy a punto de ganar pero si quieres que pierda lo propio es que te unas a mi”. Por lo que comencé a hablar con sus amigos, me preguntaban cosas de todo tipo. Por las facciones y gestos de sus rostros esperaban que me escandalizase por lo que decidí hacerme la sorprendida, si les hubiese mostrado mi lado oscuro desde el principio otro gallo hubiese cantado. Estuvimos jugando unas tres horas, tiempo suficiente para conocernos y llevarnos una ligera impresión de cada uno, la verdad yo hubiese seguido con ellos charlando, pero mi madre me llamó para que le ayudase a hacer la cena, algo que me sirvió de excusa para llamar a mi amiga Lidia y contarle lo guapo que era Juan, el amigo más callado de mi primo Lucas, pero sin duda el más interesante. Si pensabais que no había echado un ojo estabais equivocados.

Llegó el momento de la cena por lo que mi tía nos reunió a todos en la mesa, en ese momento le llegó a mi primo una invitación de una fiesta privada a la que por razones obvias me auto-invité.

Cuando salimos de casa todo parecía que iría bien, hasta que vi a Juan de la mano de esa chica, algo que sin duda, no pasaba desapercibido, la verdad que era guapísima. Yo me puse despampanante, un vestido negro apretado de transparencias y su mirada se clavó en mí como un alfiler.

Cuando llegamos a la discoteca nos dirigimos hacia el reservado y nos sentamos alrededor de una mesa redonda. El camarero nos trajo unas botellas de ginebra y tónica, por lo que comenzamos a bebernos unas copas y fumarnos una cachimba.

Juan era muy guapo, tenía buen cuerpo y además una personalidad fuerte y atractiva (una vez que conseguía entrar en confianza). Era gracioso, inteligente, curioso y a partir de la segunda copa un hablador nato.

Por el respeto que tiene a mi primo, entendía que me tuviese tachada de su lista de conquistas. Es por lo que sus miradas eran furtivas, con disimulo no conseguía quitarme el ojo de encima.

Algo que me resultó curioso fue cuando me acerqué a preguntar si querían algo más de tomar y me encontré que estaba metido en mi perfil de instagram. No es algo que me molestase, pero si me había sorprendido un poco ya que su novia estaba al lado.

Con el paso de la noche y de las copas el ambienté se relajó, todo eran risas y tragos y mi primo había bajado la guardia, por lo que era el momento perfecto para hablar con Juan. Su novia la verdad que además de muy guapa era bastante simpática.

Después de que su novia hubiese hablado conmigo Juan seguía mirándome, ella se dio cuenta varias veces, pero a diferencia de otras situaciones no se veía molesta, o al menos disimulaba los celos bastante bien. He de confesar que me gustó mucho la seguridad que radiaba esa chica, sabía que era guapa y no se sentía menos que yo, algo que sin duda corría en ambas direcciones.

Ella  se abrió y pudo contarme varias intimidades, entre ellas lo bueno que era su novio en la cama,  estaban al principio de la relación y sin duda son los mejores momentos.

Tras un rato en la discoteca me dijeron que si los acompañaba al coche a por el móvil, a lo que sin duda tuve que responder con un rotundo sí. De forma muy natural me dirigí hacia los aparcamientos mientras ellos se besaban salvajemente.

Cuando llegamos al coche ella se quitó el top que llevaba y él inmediatamente se bajó los pantalones, cuando dije de irme me sujetaron la mano y ella me pidió amablemente que los siguiese. Era la situación ideal para una noche llena de sexo salvaje y placer extremo.

  • ¿Te sientes cómoda? Me preguntaron ambos a la vez.
  • Yo respondí con un firme sí, mientras me deshacía de ese vestido negro apretado.

En ese momento me di la vuelta y dejé mi cuerpo pegado a los suyos. Sin reparo comenzaron a tocarme el trasero. Me lance hacia ellos y les puse de rodillas, me encantaba ese juego y la forma en la que me tocaban mientras se fundían en un beso.

Por fin estaba disfrutando de sus cuerpos, mientras él me realizaba sexo oral ella estaba dándome un beso apasionado, yo con mucho hincapié me arrodillé e intenté demostrarles que era la mejor, quería hacerlos saber que si algo habían hecho bien en su relación era haberme conocido. Estuvimos así un buen rato mientras emitíamos gemidos llenos de placer.

Puse a los dos encima del capó del coche, al lado había algunos de botellón pero no conseguían vernos ya que estaba todo muy apagado. En ese momento comencé a tocarles bruscamente, él sin querer y de un fuerte gemido soltó un orgasmo con todo lo que llevaba dentro. Así se puso de rodillas y nos practicó sexo oral mientras nosotras nos tocábamos y nos fundíamos en un beso apasionado hasta que al unísono y de forma irremediable culminamos con un grito.

Tras acabar nos vestimos y nos dirigimos hacia la discoteca, mi primo estaba enfadado en la puerta gracias a lo que habíamos tardado, a lo que Juan respondió, lo siento no lo encontrábamos y hemos tenido que buscar muy a fondo. Los tres lanzamos una sonrisa mientras cogimos taxis diferentes.

Como buen Géminis Noa experimentó una noche de pasión guiada por dos cómplices curiosos dispuestos a descubrir y probar nuevas experiencias.

Si lo que quieres es una persona que se guíe por la originalidad y el morbo de la situación tenemos a tu candidato, sorpréndele con juegos, juguetes y fantasías.

¡Las tentaciones más prohibidas merecen un pecado como Géminis!

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